La economía argentina llegó a las PASO en terapia intensiva. Ha estado en crisis durante varios años, y las elecciones primarias han sido un momento crucial para el país. Los analistas previeron que los resultados de las PASO podrían tener un gran impacto en la economía argentina y en la confianza de los inversores. Y así ha sido.
En los últimos años, la situación macroeconómica ha sido un quebradero de cabeza para la administración pública. La inflación ha sido alta, la deuda externa ha aumentado y se ha producido una recesión. Además, la pandemia de COVID-19 tuvo un impacto significativo, con una caída del PIB del 10% en 2020.
A pesar de estos desafíos, el gobierno nacional ha intentado salir del foso. En julio de 2023, la recaudación tributaria nacional ascendió a $3.571. Además, las autoridades entre las que se encuentra el ministro de economía y candidato por el partido oficial, Unión por la Patria, Sergio Massa, firmó acuerdos bilaterales para la refinanciación de la deuda con el Club de París.
Estos esfuerzos tuvieron la intención de mejorar la salud financiera. Sin embargo, el día a día sigue siendo complicado para el ciudadano de a pie. El país sigue siendo muy dependiente de las exportaciones de materias primas, lo que la hace vulnerable a las fluctuaciones de los precios internacionales. La agricultura industrializada ha contribuido a la pérdida de biodiversidad y no ha conseguido equilibrar la seguridad alimentaria, amén de las sequías que se han extendido durante tres años.
La nación llegó a las elecciones primarias con un alto nivel de pobreza e inflación, y unos días previos llenos de eventos impactantes de inseguridad en la mayor provincia del país.
Devaluación, consecuencia inevitable. Las PASO hablan.
Hoy el Banco Central argentino devaluó el peso un 18,3%, tras la derrota del peronismo en las PASO 2023, que quedó en el tercer lugar de las presidenciales. La institución ha establecido el tipo de cambio en 350 pesos por dólar, 67 más que el viernes.
La caída del peso es la más brusca desde agosto de 2019, cuando la moneda argentina perdió un 25% de su valor tras las primarias en las que el peronismo venció a Mauricio Macri. El BCA ha decidido también aumentar los tipos de interés hasta el 118% en un intento de anclar las expectativas cambiarias y minimizar el impacto de la devaluación en los precios.
La desvalorización de la moneda se produjo tras la victoria del candidato libertario Javier Milei en las elecciones primarias argentinas de este domingo, con el 30% de los votos. Milei ha capitalizado el voto protesta, logrando el 30,2% de los apoyos y asestando un duro golpe al frente opositor Juntos por el Cambio y al peronismo.
El triunfo de Milei ha generado incertidumbre en los mercados financieros. Según EFE, los bonos soberanos argentinos que cotizan en Wall Street y otros mercados internacionales reaccionaron en negativo este lunes con caídas cercanas al 10%.
Mientras tanto, este lunes el valor actual del dólar blue cerró en $685.00 para la venta y $665.00 para la compra en casi toda la Argentina. En las provincias de Salta y Córdoba, alcanzó $700 pesos para la venta a primeras horas de la tarde y luego se homogeneizó con el resto del país. El camino hasta octubre será un desafío para todas las fuerzas políticas y, más aún, para los electores y sus familias.
