Un nuevo trabajo de PwC Argentina, titulado “Empresas familiares: el gran desafío de la transformación”, destaca la urgencia con la que las empresas familiares argentinas deben adaptarse para sobrevivir en un entorno de negocios global cada vez más volátil y competitivo. La publicación, elaborada por el socio de la firma, Norberto Rodríguez, analiza cómo fenómenos globales como los conflictos internacionales, el reordenamiento de los mercados y el imparable avance de la inteligencia artificial están obligando a estas organizaciones a una profunda revisión de sus estrategias.
En el contexto de Argentina, el desafío se intensifica. La apertura comercial ha favorecido la importación de productos, lo que ha puesto a muchas empresas familiares en una encrucijada, forzándolas a reconsiderar sus modelos de negocio. El informe señala que, para mantener la competitividad, se requiere una mayor inversión en tecnología, especialmente en inteligencia artificial y herramientas digitales.
El reporte de PwC Argentina enfatiza que los cambios en el entorno obligan a las empresas, especialmente a las familiares, a innovar y reinventarse. Para superar los desafíos de competitividad y los cambios en los patrones de consumo, estas empresas deben embarcarse en un proceso de transformación profunda.
“La transformación de las empresas familiares ya no es una opción, sino una necesidad imperante. Los cambios tecnológicos y de mercado están redefiniendo las reglas del juego. La clave del éxito para estas organizaciones residirá en su capacidad para innovar, gestionar los desafíos internos de la familia y adaptar sus estructuras para fortalecer su perfil competitivo en este nuevo mundo”, Norberto Rodríguez, socio de PwC Argentina.
PwC revela que algunas empresas familiares han sabido responder a esta presión, reformulando sus operaciones, incorporando insumos importados para optimizar costos o estableciendo nuevas alianzas estratégicas. Sin embargo, también advierte que otros sectores no han logrado reaccionar con la misma velocidad, enfrentando una disminución de su actividad y la necesidad de ajustar sus estructuras.
La publicación también pone de relieve los desafíos internos, señalando que la toma de decisiones difíciles, como los esfuerzos económicos para financiar inversiones, puede generar tensiones y dudas sobre la capacidad de liderazgo familiar. El informe concluye que la superación de estos obstáculos dependerá, en gran medida, del esfuerzo concertado de la empresa y del grado de integración de la familia en la visión de negocio a largo plazo.
