Aruba, la isla feliz, ratificó su compromiso con el mercado argentino con un evento en el cual desplegó toda su propuesta turística. Argentina creció durante el mes de mayo 155,5% y, en lo que va del año, un total de 92,2%.
Dado que es una de las opciones emergentes en el mercado argentino para visitar el Caribe, la Autoridad de Turismo de la isla llevó a cabo un evento, en el Palacio Paz de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con formato de networking para que los profesionales del turismo puedan capacitarse con sus propuestas y enterarse de sus novedades.

Allí se reunieron representantes de cadenas hoteleras, DMCs y más empresas turísticas con presencia en la isla. «Además de que conozcan todas las novedades y propuestas de la isla, esta es una manera con la que la Autoridad de Turismo de Aruba agasaja a nuestros clientes del trade, que prácticamente manejan el 80% de las transacciones. En ese sentido, este año es muy promisorio», aseguró Pablo Rodríguez, Chief Happiness Officer de Solvera, representante de Aruba en Argentina.
Aruba se posiciona en el mercado argentino como destino alternativo en el Caribe ideal para viajeros experimentados y para quienes buscan propuestas premium. De acuerdo a estadísticas oficiales, Argentina creció durante el mes de mayo 155,5% y en lo que va del año un total de 92,2%
Durante 2024 en total 27 mil argentinos visitaron la isla, y en esa línea, las autoridades esperan finalizar este año con el arribo total de 45 mil, lo que representaría un crecimiento total superior al 65%. De esta manera, en lo que va del 2025, Argentina se posicionó como el segundo mercado latinoamericano de Aruba y el tercero a nivel mundial, muy cerca de Colombia (2°) y Estados Unidos (1°).

El turismo es parte del ADN de los ciudadanos de Aruba
En el marco de este importante evento, Negocios y Placer Magazine entrevistó a Jordan Schlipken Croes, Director Latin America Aruba Tourism Authority desde hace 3 años, pero ocho trabajando para la institución.
NyP Magazine: ¿Cuánto comenzó su trayectoria en este cargo?
Jordan Schlipken Croes: Soy born and raised, nacido y crecido en Aruba. Por lo cual, claro, es mi casa, es mi hogar, así que sin duda es un gusto poder promocionarlo, poder hablar del destino, poder decir que vivimos del turismo.
¿Usted es del ámbito del turismo o tiene una trayectoria dentro del turismo?
Arranqué más bien por los negocios. De hecho, tengo un MBA en negocios. Pero al final, yo siempre digo, todos que somos de Aruba tenemos el turismo en la sangre, ¿no? Es decir, aunque no es lo que arrancamos, pero desde niño lo que es tratar al turista, darle su bienvenida, orientar al turista, es como parte de nuestro ser, es parte de nuestro ADN.
Entonces, siempre tenemos ese amor por ellos.

Las islas ABC son muy conocidas, ¿cuál ha sido el principal desafío de hacer el marketing del destino arubeño para usted?
Yo creo que el desafío para Aruba específicamente es encontrar el balance, el balance entre lo económico, pero también del bienestar de la isla. Porque como Aruba, nosotros mientras queremos turistas, queremos que nos visiten porque aporta económicamente, también siempre hay que encontrar el balance de hasta qué punto queremos tanto depender del turista, pero también qué volumen.
Porque eso es un tema que no es un secreto ya, nosotros tenemos que encontrar ese balance perfecto de que tampoco entremos a ser un destino masivo, que hay otros destinos que vemos que están ahí y nosotros no quisiéramos o sabemos muy claro qué es lo que no queremos.
Dicen que los establecimientos all inclusive no están dentro de la oferta de Aruba, ¿de ser así, por qué?
Sí, nosotros tenemos una racionalidad muy clara sobre esto, nosotros damos la bienvenida a lo que son hoteles todo incluido, pero nosotros siempre buscamos propiedades o marcas que aportan lo máximo posible a la economía de Aruba. Y al ser un resort todo incluido, hace que la economía quede muy centralizada en esta propiedad, mientras que nosotros queremos que la economía llegue a toda la isla. Con eso en mente, impulsamos mucho lo que son los hoteles solo con desayuno, con la misma seguridad que ofrece la isla que puedes ir a salir, a explorar y también construir económicamente a toda la isla. Eso es un poco la racionalidad.
En ese sentido, ¿cuál sería el aporte del turismo al PIB de Aruba?
En este caso es el 80%, que es el segundo país en el mundo que más depende del turismo. Y que tiene unas estadísticas muy significativas en cuanto a visitas, ¿anualmente cuántas personas reciben? Nosotros recibimos 1.4 o 1.5 millones de turistas al año.
¿Cómo están haciendo con las políticas medioambientales, que están tan discutidas en este momento por los organismos multilaterales?
Sí, es un tema que nosotros mientras no lo comunicamos directamente porque queremos ser prudentes con eso, pero sí llevamos unos años, en realidad más de 10 años trabajando en eso. Un ejemplo, el plástico de un solo uso en Aruba no es que es prohibido, sino que no existe. Es prohibido, evidentemente, pero no existe. El plástico de un solo uso no lo permitimos ni siquiera ingresar a la isla, que es uno de los esfuerzos que hacemos. Tenemos molinos de vientos: el 22% de la isla depende de energía eólica. Entonces, hacemos esfuerzos y como identidad o como oficina, nosotros invertimos en esto también. Pero este año específico dimos un paso adicional.
Una cosa es lo que hacemos en Aruba, pero ahora lo que estamos también trabajando es en educar o más bien intentar explicar al huésped, que ya no los estamos llamando visitantes, sino huésped, de que estás bienvenido a nuestra casa. Hay diferencias entre ambos y tenemos ciertas reglas o normas en nuestra casa para los visitantes. Y en cierta forma les explicamos que protégemos, qué mantenemos limpio, qué debe respetarse en la isla y qué valor tiene nuestra cultura.
Si vas a la playa y ves una tortuga, no la toques, déjala en su espacio. Si vas a parquear tu carro cerca de la playa, que no sea encima de arena -y explicamos los motivos de por qué no hacerlo-. En cierta forma, nosotros como destino debemos proteger nuestra casa, pero también hacer que los visitantes, en este caso los huéspedes, entiendan por qué hay que protegerla.
En ese sentido, ¿cómo es el marketing de turismo para educar a la gente? ¿Cómo es la inversión que ustedes hacen en cuanto a publicidad, divulgación, promoción?
Nosotros lo llamamos el turismo responsable. Hoy en día, muchos vecinos buscan lo que es el turismo sostenible, y nosotros dijimos, vamos a dar un paso atrás. La palabra sostenible viene con una responsabilidad muy importante, que nosotros queremos ser prudentes, somos muy pensativos en lo que decimos, por lo cual dijimos, antes de decir que queremos ser sostenible, que claramente lo queremos ser, hay un paso atrás.
Y ese paso atrás es, ¿cómo podemos ser un turismo responsable con una visión hacia un turismo sostenible? Entonces, con eso estamos trabajando, nuestra comunicación de, estás invitada a nuestra casa, pero también que nos la cuidas para las próximas generaciones.
Turistas argentinos y del Cono Sur en la mira de Aruba
En cuanto a la Argentina, ¿nos gustaría cifras de cuántos visitantes?
Como esto es el 80% de nuestro PIB, es nuestro trabajo saber los números exactamente. Entonces, antes de dar los números, porque no quiero que suene contraproduciente, es, por un lado, estamos buscando un turismo responsable, por lo cual no estamos buscando mucho volumen más, pero específicamente de Latinoamérica, sí, la estrategia es crecer.
Y la pregunta, o la respuesta más bien del por qué es, nosotros hoy en día dependemos en gran escala de Estados Unidos, queremos diversificar la economía de tener más latinoamericanos por lo que estamos buscando ese balance y con eso en mente, entonces tenemos que crecer lo que es Argentina, Brasil y Chile.
Entonces, para Argentina específicamente, que va en línea con la estrategia, hoy en día estamos tratando de aumentar un 80% más de argentinos que el 2024. Estimamos cerrar el año en 45 mil argentinos, donde el año pasado era solamente 27 mil. Entonces, va en línea con lo que queremos, queremos más argentinos, queremos más chilenos y queremos más brasileños.
Nos gustaría saber si tienen en perspectiva algún tipo de promoción especial, justamente para incentivar ese aumento de visitantes del Cono Sur.
El incentivo lo buscamos por medio de las aerolíneas. Nosotros llevamos dos, tres años trabajando en aumentar lo que son las sillas desde Latinoamérica. ¿Y qué efecto tiene esto? Más bien, ¿qué es lo que cambió? Antes Avianca y Copa, eran las únicas que brindaban la opción de llegar desde Argentina, en este caso, a Aruba. Hoy tienes a Avianca, Copa Airlines, Latam Airlines y también a Gol Airlines.
¿Qué efecto tuvo esto? Mayor sillas, mayor oferta, reducción de costo de las sillas. Donde antes era mil dólares ir a Aruba desde Argentina, hoy puede ser tranquilamente 500, 600 dólares. Entonces los precios han disminuido bastante y se hace mucho más accesible a través de la conectividad aérea llegar hasta Aruba. Entonces creo que eso es un incentivo indirecto: las personas pueden seguir viajando o seguir viajando más hacia Aruba desde esta región.

¿Viajan todo el año o hay, por cultura del viaje, un manejo distinto por parte de los argentinos, de los brasileños, de los chilenos, de los tiempos de preferencia?
Ellos tienen su perfil y vemos de esa forma que enero, febrero, julio, etc, son frecuentes los viajes. Pero durante todo el año vemos bastante estable la tendencia, que puede subir 5 puntos más, pero realmente es casi todo el año.
Para finalizar, ¿cuál sería su invitación específica, tanto al sector B2B como al sector B2C argentino para que visiten Aruba?
Nosotros invitamos al consumidor o al negocio a un destino seguro, un destino tranquilo, un destino que jamás decepciona. Todos queremos ir de vacaciones, sea para hacer negocios o sea para realmente desconectar. Y quisieras tener el mejor producto a un costo que lo merece, ¿no? Una cosa es pagar económico; pues, recibes económico. Pero pagar justo a lo que vas a recibir es lo que ofrecemos. Entonces, en inglés, lo podríamos decimos así: “you get what you pay for”. Y en Aruba estamos convencidos de que si bien tenemos precios mayores que el Caribe tradicional, también ofrecemos un producto y un servicio más alto.
-Por Marsolaire Quintana y Malena Alcaro para NyP Magazine