La inevitable realidad es que todo se va a electrificar y las baterías son parte del futuro. El espacio del litio se ha vuelto abarrotado y caótico, mientras que el componente de batería menos conocido, el grafito, es un extraordinario tesoro de $23 mil millones de dólares listo para ser aprovechado. Se proyecta que para 2032, tendrá un valor estimado de $43 mil millones de dólares.
Pero no se trata de lápices o portaminas escolares. Se trata del elemento más importante de una transición energética de varios miles de millones de dólares. Se trata de otro aumento del 35% en las ventas de vehículos eléctricos esperado para 2023 y de un crecimiento explosivo aún mayor en el futuro. Se trata de los materiales básicos que componen las baterías para alimentar este crecimiento explosivo.
El grafito representa entre el 95% y el 99% del material del ánodo (electrodo negativo) en las baterías de ion de litio, en diferentes combinaciones naturales y sintéticas.
Cualquier batería de ion de litio puede contener hasta 15 veces más grafito que litio, lo que representa aproximadamente el 25% del volumen total de la batería. Es por eso que Elon Musk una vez opinó que las baterías de ion de litio deberían llamarse “baterías de níquel-grafito”.
No hay una solución inmediatamente viable para reemplazar eficazmente la batería de ion de litio. En toda la industria, se cree que el grafito seguirá siendo el material del ánodo principal en el futuro previsible. Y América del Norte no tiene producción comercial…
Sin embargo, las fábricas de baterías planificadas en América del Norte representan una demanda de aproximadamente 1 millón de toneladas métricas por año de material de ánodo de grafito. Esto convierte a este mercado de $23 mil millones de dólares en uno de los mejores en los que se puede estar.
El litio argentino en la mira
Muchos no se dan cuenta de que el grafito es el componente más grande en volumen en una batería de vehículo eléctrico “porque el grafito hace su trabajo en silencio, como lo ha hecho desde los años setenta”, según John DeMaio, CEO de Graphex Technologies.
Graphex es una empresa especializada en la refinación de grafito con una década de experiencia en el procesamiento de este mineral. La empresa ha establecido fuertes vínculos con Beijing y está implementando una expansión a gran escala para aumentar su producción de grafito.
La empresa ha priorizado a América del Norte para localizar las capacidades de procesamiento y producción de grafito de extremo a extremo y ha seleccionado Michigan como el lugar para su primera instalación fuera de Asia. Pero en sus análisis aparece el nombre de mineras de litio a las que apunta, alguna de ellas con vida en Argentina.
Esta empresa está implementando actualmente una expansión a gran escala para aumentar la producción a 20,000 toneladas anuales en los próximos 12 meses. La refinación del grafito es el aspecto más rentable y especializado de la cadena de suministro de este mineral. La minería en sí misma está llena de costos exorbitantes, cargas regulatorias y operaciones desafiantes.
Es así como se repite la misma pregunta que se le hace al concepto de exportación de litio: ¿Puede Argentina refinar grafito, sumarse a la competencia? ¿Es factible y redituable hacerlo? ¿Quiénes serían sus principales mercados o si estaría en capacidad, al menos, de cubrir la demanda interna en caso de producir baterías de litio-grafito?
Un mundo de posibilidades para el grafito
La investigación científica ve una multitud de aplicaciones para el grafeno que probablemente aumentarán la demanda aún más en el futuro. Las propiedades únicas del grafeno probablemente tendrán un gran uso biomédico, específicamente con la entrega de medicamentos dirigida, implantes inteligentes e ingeniería de tejidos.
En el sector industrial, los compuestos basados en grafeno se pueden utilizar como una alternativa no tóxica a la protección contra la oxidación, así como un recubrimiento mejorado para pantallas táctiles, teléfonos y tabletas.
El grafeno también se puede utilizar para mejorar la cadena de circuitos de las computadoras, mientras que los supercondensadores de grafeno son grandes impulsos de energía con una energía comparativamente baja.
Eventualmente, debido a que el grafeno es liviano, podría usarse en la fabricación de automóviles y aviones, reduciendo significativamente su peso. Por último, pero no exclusivamente, los sensores ultra sensibles de grafeno podrían detectar partículas aéreas minúsculas, convirtiéndolo en una tecnología preventiva potencial para cualquier pandemia futura.
El grafito en el radar argentino
El mercado del grafito en Argentina ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años. A continuación, se presentan algunas de las principales mineras que lo explotan grafito:
Grafito de Argentina S.A.
Es una empresa argentina dedicada a la extracción y procesamiento de grafito natural. Cuenta con una mina en la provincia de San Luis y produce diferentes tipos de grafito, incluyendo grafito de alta pureza utilizado en aplicaciones industriales y grafito de batería.
Grafito de Córdoba S.A.
Esta empresa también se dedica a la extracción y procesamiento de grafito natural en Argentina. Tiene una mina en la provincia de Córdoba y produce grafito de alta calidad utilizado en la fabricación de electrodos y otros productos.
Minera Santa Cruz S.A.
Aunque su principal enfoque es la extracción de minerales de oro y plata, Minera Santa Cruz también produce grafito en su mina San José, ubicada en la provincia de Santa Cruz. El grafito extraído se utiliza principalmente en aplicaciones industriales.
El litio que arrastra al grafito
Argentina cuenta con reservas de grafito en varias provincias, incluyendo Catamarca, Córdoba, La Rioja y San Luis. Estas reservas presentan diferentes características y potencial para la explotación minera. En la provincia de Catamarca, se encuentran reservas de grafito de alta cristalinidad y pureza, lo que lo hace altamente cotizado en el mercado internacional. Mientras que en las provincias de Córdoba y San Luis, el grafito se presenta en forma de escamas dentro de rocas metamórficas. Todo este recurso es muy codiciado por las empresas de litio.
Lithium Americas Corp., por ejemplo, es una empresa canadiense que se dedica a la exploración y producción de litio en Argentina y Estados Unidos. Su enfoque no se limita solo a este mineral, ya que también tienen activos de boro y de grafito que agregan una faceta única a su identidad.
En Argentina, esta empresa tiene dos proyectos principales: Caucharí-Olaroz y Pastos Grandes. El proyecto Caucharí-Olaroz se encuentra en la provincia de Jujuy, en el noroeste de Argentina, y es uno de los mayores yacimientos de litio del mundo
La empresa ha anunciado que ha producido su primer carbonato de litio de calidad inferior a la de las baterías como parte de la puesta en marcha del proyecto. La producción de carbonato de litio de calidad de batería se espera que comience en la segunda mitad de 2023.
Lithium Americas Corp. ha invertido más de mil millones de dólares en sus proyectos de litio en Argentina. La empresa espera producir 40,000 toneladas de carbonato de litio por año en Caucharí-Olaroz y Thacker Pass.. Además, la empresa está planeando una expansión de la capacidad de producción en Caucharí-Olaroz de al menos 20,000 toneladas por año. Se espera que la demanda de carbonato de litio alcance las 40,000 toneladas por año para 2030. El grafito irá aparejado en esta demanda.