El coaching se va transformando, no es estático y eso incluye la perspectiva de género. A pesar de algunos avances en la incorporación de las mujeres en puestos directivos, persiste una brecha en la retención y ascenso a roles de liderazgo. La falta de apoyo para el desarrollo ha sido identificada como un factor clave. En este contexto, el coaching empodera a las mujeres líderes para prosperar frente a los desafíos laborales a través de una serie de estrategias.
El descarrilamiento profesional, una experiencia desafiante y dolorosa, se produce cuando líderes, considerados inicialmente capacitados para el rol, pasan a ser percibidos de manera diferente y pueden ser desvalorizados o expulsados de la organización. Por otro lado, la resiliencia es el resultado clave del afrontamiento a esta cuestión, no sólo implica recuperación sino, en muchos casos, un crecimiento consciente.
A través de la entrevista que realizó la ICF (International Coaching Federation) a coaches ejecutivas, surgieron seis estrategias fundamentales que las mujeres líderes pueden aplicar para desarrollar un proceso de resiliencia y superar desafíos en su trayectoria. Estas son:
1. Fortalecer las redes de apoyo: Incluyendo relaciones personales y profesionales para enfrentar desafíos con respaldo sólido.
2. Mejorar el autocuidado: Abordando el cuidado desde la dieta y haciendo ejercicio para mantener el equilibrio tanto emocional como físico.
3. Desarrollar la autoconciencia: Reconocer virtudes, valores y áreas de mejora para un liderazgo más efectivo.
4. Ampliar habilidades de afrontamiento: Incluyendo reformular la adversidad, pedir ayuda y adoptar una mentalidad de crecimiento.
5. Actualizar fortalezas: Reforzando confianza, autoestima y autoconcepto para un liderazgo sólido.
6. Clarificar el propósito: Definiendo valores fundamentales, perspectiva de vida completa y misión personal para una dirección clara.
Las mujeres líderes que han aplicado estas estrategias experimentaron un mejor desarrollo personal, redes de apoyo más sólidas, habilidades de liderazgo mejoradas y mayor éxito profesional. El autoconocimiento resulta crucial ya que permite establecer límites más fuertes y lograr un equilibrio más satisfactorio entre el trabajo y la vida personal.
En definitiva, aunque las mujeres líderes enfrentan desafíos intensos, la investigación subraya que el coaching puede ser fundamental para superar obstáculos. Los coaches, con competencias clave y conciencia de estrategias resilientes, guían a sus clientes hacia transformaciones más allá de la supervivencia, impulsando la verdadera esencia del coaching.